Existe una gran variedad de historias y leyendas que hacen referencia a la procedencia del café.

Su efecto estimulante sobre el cuerpo humano se descubrió por casualidad, al igual que las virtudes terapéuticas del té, pero más de mil años después.

Hay una leyenda muy popular de la que ya hablamos un poco en otro artículo y hoy vamos a hablar nuevamente de ella: el café en Etiopía (cuerno de África) como origen del famoso homónimo “Café Etiopía”.

 

Leyenda etíope

Según la leyenda, todo comenzó en el siglo IX en Abisinia, el territorio que ocupa Etiopía hoy en día. Un pastor llamado Kaldi que vivía en la provincia de Kaffa se sorprendió de que sus cabras estaban muy enérgicas y no podían dormir por la noche después de consumir frutos de un arbusto extraño.

Kaldi cosechó algunos de estos frutos y los llevó a los sabios monjes locales. Estos monjes de su poblado realizaron un brebaje con dichos frutos, sin embargo no tenía muy buen sabor, por lo que decidieron tirarlo al fuego, en ese momento los granos tostados daban un olor tan agradable que los monjes volvieron a probar el brebaje una vez los granos se habían tostado, surgiendo así esta bebida.

 

Historia del café en Europa

El café comercial entró en Europa a través de Venecia, donde el primer café público – el «Café Florian» – abrió en 1645. El café llegó poco después a Francia (1659), expandiéndose su consumo rápidamente y a gran escala.

Desde entonces, las casas de café en Europa se convirtieron en lugares influyentes, frecuentados por artistas, intelectuales, comerciantes, banqueros, etc., siendo un foro para actividades políticas y desarrollo de la sociedad.

Surgieron varios opositores al café en todos los lugares. En Italia, alrededor de 1600 los sacerdotes pidieron al Papa Clemente VIII que prohibiera la bebida favorita del Imperio Otomano, considerándola parte de la amenaza infiel. Sin embargo, tras beber un sorbo, el Papa la encontró deliciosa y la bautizó como una aceptable bebida para los cristianos de todo el mundo.

 

1963: nace la ICO (Organización Internacional del Café)

Se establecieron cuotas de café, tanto a países productores como importadores, para evitar una continua variación de los parámetros en juego. Esta organización está sustentada por fondos procedentes de sus miembros, distribuidos proporcionalmente a la posición que ocupan en el mercado internacional. Así, Brasil y Colombia por un lado y EE.UU y algunos países de Europa Occidental por el otro, son la base económica de la organización en la actualidad.